domingo, 2 de septiembre de 2007

El beso del Highlander


Acabo de terminar esta novela y...madre mía!!!
Como aficionada al genero romántico ( y en general a cualquier tipo de genero, ya que leo desde fantasía épica a ciencia ficción) debo decir que este libro me ha parecido una maravillosa mezcla entre el amor, profundo y empalagoso, entre dos personas y los viajes en el tiempo.
Pasamos de tener a un escoces del siglo XVI en la época actual con una americana científica y escéptica, al castillo del chico hace 500 años con una americana, que aunque científica tiene que admitir que todo lo que pasa a su alrededor es de lo mas real.
¿A quien no le gustaría vivir un romance que abarque siglos?
Si yo he vivido un amor que me ha durado un año y medio, y he sido en ese tiempo, la persona mas feliz del mundo, no me podría imaginar poder estar con el incluso a través del tiempo...
Claro, que también pude entender mejor el dolor que se siente, cuando ves que has perdido a la persona a la que amabas, cuando te das cuenta, que no vas a volver a verle...bueno, en su caso es peor por que el tío en cuestión, llevaría como 5 siglos muerto.
Ya digo, que he leído muchas novelas romanticonas (soy lo peor), pero son la mejor lectura ligera que encuentro, por eso puedo decir que El beso del Highlander me ha llegado hondo.
No se si es de agradecer o no, que las escenas de sexo te las expliquen de una forma tan detallada. Acostumbrada a las llamadas "escenas de botas", en las cuales la primera escena es, la pareja besándose y desnudándose, y la siguiente escena, son los dos vistiéndose y el atándose las botas, estas escenas tan explicitas se me hacen incluso raras...parecen mas literatura erótica que una novela romántica.
Es verdad, que en estas novelas, el sexo entre los personajes es el punto cumbre de la relación tortuosa y enrevesada, y suele ser de lo mas romántico, erótico, húmedo y sexy.
En este libro, el sexo es apasionado y brutal, aunque con esos 2 metros de guerrero escoces de negros cabellos y mirada penetrante, es imposible que el sexo se practique de otra manera.
¿Que mujer no sueña con un hombre de semejantes rasgos y virilidad...?

Yo la verdad me cambiaba con Gwen, sin pensármelo...

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